El cutting es una forma de autolesión en la que la persona se provoca cortes en la piel de manera intencionada y repetida, sin la intención inmediata de quitarse la vida. Esta conducta, que suele iniciarse durante la adolescencia pero que también puede presentarse en adultos, es una forma de canalizar y aliviar el dolor emocional intenso, la ansiedad, la soledad o el malestar interno.
En este artículo, exploramos en profundidad qué es el cutting desde la perspectiva de la psicología, sus etapas, causas y las estrategias para prevenirlo y tratarlo.
¿Qué es el Cutting?
El cutting se refiere a la acción de autolesionarse utilizando objetos afilados—como cuchillos, navajas, alfileres o incluso fragmentos de vidrio—para producir cortes superficiales o profundos en zonas del cuerpo que suelen ser fáciles de ocultar (por ejemplo, brazos, piernas, abdomen o muslos). A diferencia de las conductas suicidas, la autolesión a través del cutting no busca terminar con la propia vida, sino liberar el dolor emocional y recuperar una sensación momentánea de control.
Características del Cutting
- Expresión del dolor emocional: La autolesión se convierte en una forma de traducir emociones intensas y abrumadoras en un dolor físico que, paradójicamente, puede proporcionar alivio.
- Conducta repetitiva y escalable: Inicialmente, los cortes pueden ser superficiales y esporádicos, pero con el tiempo, la conducta puede volverse más frecuente y, en algunos casos, más peligrosa.
- Función simbólica: Los cortes pueden funcionar como un grito de ayuda, una señal para el exterior de que la persona está sufriendo, o incluso una forma de “castigo” personal.
Etapas y progresión del Cutting
Aunque cada individuo es único, el cutting suele seguir una progresión general:
- Inicio en la adolescencia:
- Comienza alrededor de los 12 a 14 años.
- Los primeros episodios son esporádicos y generalmente involucran cortes superficiales en áreas discretas.
- Evolución de la conducta:
- Con el tiempo, la frecuencia de los cortes puede aumentar.
- La persona puede pasar de cortes leves a autolesiones más profundas o peligrosas.
- Establecimiento como mecanismo de afrontamiento:
- La conducta se refuerza a través de la liberación de endorfinas, que generan una sensación temporal de alivio.
- Se convierte en un hábito difícil de romper, ya que actúa como una vía para manejar el dolor emocional.
Causas y factores de riesgo
El cutting no surge de la nada. Aunque las causas pueden variar de una persona a otra, algunos factores comunes incluyen:
- Trastornos mentales:
- Depresión, ansiedad o trastorno límite de la personalidad.
- Experiencias traumáticas:
- Abuso emocional, físico o sexual, bullying o acoso escolar.
- Baja autoestima y dificultades en la regulación emocional:
- Falta de herramientas para gestionar emociones intensas.
- Influencias sociales:
- Imitación de conductas autolesivas vistas en pares o en redes sociales.
- Factores biológicos y genéticos:
- Predisposición que puede influir en la vulnerabilidad frente a conductas autolesivas.
Consecuencias del Cutting
Aunque a menudo se minimiza, el cutting puede tener consecuencias serias tanto a nivel físico como emocional:
- Físicas:
- Infecciones, cicatrices permanentes, lesiones nerviosas o, en casos graves, la necesidad de intervención médica.
- Psicológicas:
- Empeoramiento de trastornos mentales subyacentes, estigmatización, aislamiento social y aumento del riesgo de suicidio.
Prevención y tratamiento del Cutting
Prevención
La detección temprana es esencial. Padres, maestros y profesionales de la salud deben estar atentos a señales de alerta, tales como:
- Uso excesivo de ropa para ocultar cicatrices.
- Presencia de objetos punzocortantes en las pertenencias del adolescente.
- Aislamiento y cambios bruscos en el estado emocional o en el comportamiento.
- Comentarios sobre la autolesión o expresiones de desesperanza.

Tratamiento
El tratamiento del cutting requiere un enfoque multidisciplinario:
- Terapia Psicológica:
- Terapia Cognitivo-Conductual (TCC): Ayuda a identificar y modificar los pensamientos negativos que impulsan la autolesión.
- Terapia Interpersonal o de Aceptación y Compromiso (ACT): Facilitan la comprensión y gestión de las emociones subyacentes, promoviendo estrategias de afrontamiento más saludables.
- Técnicas de Distracción y Mindfulness:
- Ejercicios de respiración, meditación y actividades que ayuden a desviar la atención del impulso de autolesionarse.
- Intervención Familiar:
- Implicar a la familia en el proceso terapéutico para crear un ambiente de apoyo y comprensión.
- Atención Médica:
- En casos severos, puede ser necesaria la intervención médica para tratar lesiones y prevenir complicaciones físicas.
El cutting es una conducta de autolesión que sirve como un mecanismo para manejar el dolor emocional, pero que puede convertirse en un hábito peligroso y debilitante. Reconocer las señales de alerta y comprender las causas subyacentes es fundamental para intervenir a tiempo. La prevención y el tratamiento eficaz requieren un enfoque integral que incluya terapia psicológica, técnicas de manejo del estrés y un entorno de apoyo emocional sólido.
Si tú o alguien de tu entorno experimenta conductas autolesivas, es crucial buscar ayuda profesional de inmediato. No se trata solo de “dejar de cortarse”, sino de abordar el dolor emocional que impulsa esta conducta. Recuerda: el camino hacia la sanación comienza reconociendo el problema y dando el primer paso hacia el cambio.
Si necesitas asesoría o tratamiento para el cutting, contáctanos para recibir ayuda especializada. Estamos aquí para apoyarte en cada paso hacia la recuperación y el bienestar emocional.